Mi Historia con Hipotiroidismo
Imagínense: Acababa de dar a luz a mi segundo hijo y estaba lista para asumir la responsabilidad de ser madre otra vez cuando recibí el diagnóstico de que mi tiroide no estaba funcionando apropiadamente y es cuando por primera vez escuche la palabra hipotiroidismo y mi vida dio un giro inesperado.
Todos tienen su propio viaje y, a veces, nuestras historias tienen similitudes que podemos vincular. También tenemos nuestros desafíos y luchas en nuestras vidas. El mío era un camino largo y difícil que tardó un par de años en resolverse. Busqué pistas sobre mis síntomas, pasé horas investigando, hice preguntas a varios médicos, armé las piezas del rompecabezas que me llevaron a sentirme como yo misma nuevamente.
Siendo mamá por segunda vez, pensé que debía sentirme eufórica. Sabía que mis hormonas se iban a demorar en estabilizar y necesitaba tener paciencia con los síntomas que estaba experimentando, pero algo inesperado cambió mi vida para siempre.
En esta historia les contaré cómo recuperé mi salud. Me convertí en mi propia detective de mi salud.
Todos tienen su propio viaje y, a veces, nuestras historias tienen similitudes que podemos vincular. También tenemos nuestros desafíos y luchas en nuestras vidas. El mío era un camino largo y difícil que tardó un par de años en resolverse. Busqué pistas sobre mis síntomas, pasé horas investigando, hice preguntas a varios médicos, armé las piezas del rompecabezas que me llevaron a sentirme como yo misma nuevamente.
Siendo mamá por segunda vez, pensé que debía sentirme eufórica. Sabía que mis hormonas se iban a demorar en estabilizar y necesitaba tener paciencia con los síntomas que estaba experimentando, pero algo inesperado cambió mi vida para siempre.
En esta historia les contaré cómo recuperé mi salud. Me convertí en mi propia detective de mi salud.
Mis síntomas:
Mi cabello largo, grueso y brillante comenzó a caerse. Fue como ver partes de mí tendidas en el suelo. Y no solo estaba en el suelo. Lo encontraba en todas partes: en mi cama, en la ducha, en mi ropa, ¡en todas partes! Poco sabía yo, este era el primer síntoma de hipotiroidismo.
¡El problema era que en ese momento no tenía ni idea de lo que estaba pasando! Me sentí deprimida. ¡Mis emociones eran locas y mi espalda comenzó a dolerme y a arder! Sentí que mi vida, como mi cabello, se iba por el desagüe. Cuando las hormonas están desequilibradas, mis estados de ánimo son como mis hijos en un columpio. Pasé de ser un rayo de sol, alguien muy optimista a una mujer que ni siquiera reconocía. Me sentí desmotivada. Empecé a ganar peso. Ni siquiera comía mucho, pero los kilos seguían aumentando. Comencé a aislarme porque no me sentía lo suficientemente segura como para salir a encontrarme con mis amigos como solía hacerlo.
Mi vida, la imagen que había imaginado de ser una madre feliz, amorosa y afectiva. ¿Qué pasó con el encantador (y bonito como un cuadro) momento que se suponía que iba a ser la maternidad? Solía tomar riesgos, siempre estaba dispuesta a probar algo nuevo. Estaba haciendo reformas en la casa, organizando cenas para amigos y familiares y, de repente, todo se oscureció. Mi entusiasmo y mi sed de vida se habían ido. Mi motivación: se fue. ¿Metas? ¿Qué son? Mi visión voló por la ventana. Esta experiencia me cegó. Solo quería algo de luz en mi vida.
¡El problema era que en ese momento no tenía ni idea de lo que estaba pasando! Me sentí deprimida. ¡Mis emociones eran locas y mi espalda comenzó a dolerme y a arder! Sentí que mi vida, como mi cabello, se iba por el desagüe. Cuando las hormonas están desequilibradas, mis estados de ánimo son como mis hijos en un columpio. Pasé de ser un rayo de sol, alguien muy optimista a una mujer que ni siquiera reconocía. Me sentí desmotivada. Empecé a ganar peso. Ni siquiera comía mucho, pero los kilos seguían aumentando. Comencé a aislarme porque no me sentía lo suficientemente segura como para salir a encontrarme con mis amigos como solía hacerlo.
Mi vida, la imagen que había imaginado de ser una madre feliz, amorosa y afectiva. ¿Qué pasó con el encantador (y bonito como un cuadro) momento que se suponía que iba a ser la maternidad? Solía tomar riesgos, siempre estaba dispuesta a probar algo nuevo. Estaba haciendo reformas en la casa, organizando cenas para amigos y familiares y, de repente, todo se oscureció. Mi entusiasmo y mi sed de vida se habían ido. Mi motivación: se fue. ¿Metas? ¿Qué son? Mi visión voló por la ventana. Esta experiencia me cegó. Solo quería algo de luz en mi vida.
Sentí la extraña sensación de que esto es lo que me merecía, que esto era lo que estaba destinado para mí. No sabía que tenía una enfermedad en ese momento, pero ahora sé que el hipotiroidismo me quitó la vida que había visionado para mi. La única motivación que tenía para mejorar y volver a sentirme yo de nuevo eran mis hijos. Se merecían una mamá saludable e iba a hacer todo lo que estuviera en mi poder para resolver esto por ellos y por mí.
Desafortunadamente, mis niveles de energía bajaron tanto que no pude motivarme ni siquiera para hacer las simples tareas de cuidar a mis hijos: jugar con ellos, preparar su comida o incluso llevarlos a la escuela. Todas estas actividades requerían de una enorme fuerza de voluntad y determinación para realizarlas cuando debieron ser algo que no tendría por qué dudar en hacerlo.
Mi memoria se deterioró tanto que mi esposo tuvo que poner una lista de tareas pendientes en la puerta del garaje para que no me olvidara de todas las tareas diarias que normalmente debía realizar. Me olvidé de las cosas más simples pero extremadamente importantes: citas con el médico, conferencias de padres y maestros, cumpleaños de amigos, pago de facturas, etc. Todo lo que quería era volver a mi cálida cama para seguir durmiendo hasta el momento en que tenía que recoger a mis hijos de la escuela. Sentí como si un camión me habia atropellado. Todos los días soñaba en encontrar una solución. Así que finalmente hice una cita con mi médico para obtener un diagnóstico.
Desafortunadamente, mis niveles de energía bajaron tanto que no pude motivarme ni siquiera para hacer las simples tareas de cuidar a mis hijos: jugar con ellos, preparar su comida o incluso llevarlos a la escuela. Todas estas actividades requerían de una enorme fuerza de voluntad y determinación para realizarlas cuando debieron ser algo que no tendría por qué dudar en hacerlo.
Mi memoria se deterioró tanto que mi esposo tuvo que poner una lista de tareas pendientes en la puerta del garaje para que no me olvidara de todas las tareas diarias que normalmente debía realizar. Me olvidé de las cosas más simples pero extremadamente importantes: citas con el médico, conferencias de padres y maestros, cumpleaños de amigos, pago de facturas, etc. Todo lo que quería era volver a mi cálida cama para seguir durmiendo hasta el momento en que tenía que recoger a mis hijos de la escuela. Sentí como si un camión me habia atropellado. Todos los días soñaba en encontrar una solución. Así que finalmente hice una cita con mi médico para obtener un diagnóstico.
Decidí comenzar a hacer mi propia investigación: buscar información en línea, leer libros, buscar un nuevo doctor que escuchara mis síntomas y que me ofreciera alternativas diferentes a lo que me ofrecían la medicina tradicional para tratar los problemas de tiroides e incluso encontré la manera de hacer mi propio análisis de sangre en línea.
Entré en un sitio web de una empresa que proporciona una orden de laboratorio sin necesidad de tener que ir a un médico. Conocía los síntomas de mi cuerpo y las pruebas que debían realizarme. Para mi sorpresa recibí los resultados de mis análisis de sangre por correo electrónico y en lugar de ir a varios médicos para realizar pruebas adicionales, ahorré mucho tiempo que me llevó a tener la medicina que necesitaba más pronto.
Asi mismo la empresa contaba con médicos que interpretaban los resultados de mis exámenes de sangre dándome así la información que necesitaba para hablar con mi doctor y hacerle preguntas inteligentes acerca de todas las medicinas disponibles para mi especifico caso que me ayudarian ha eliminar más rápidamente los síntomas de hipotirodismo que estaba sufriendo.
Entré en un sitio web de una empresa que proporciona una orden de laboratorio sin necesidad de tener que ir a un médico. Conocía los síntomas de mi cuerpo y las pruebas que debían realizarme. Para mi sorpresa recibí los resultados de mis análisis de sangre por correo electrónico y en lugar de ir a varios médicos para realizar pruebas adicionales, ahorré mucho tiempo que me llevó a tener la medicina que necesitaba más pronto.
Asi mismo la empresa contaba con médicos que interpretaban los resultados de mis exámenes de sangre dándome así la información que necesitaba para hablar con mi doctor y hacerle preguntas inteligentes acerca de todas las medicinas disponibles para mi especifico caso que me ayudarian ha eliminar más rápidamente los síntomas de hipotirodismo que estaba sufriendo.
Qué no funcionó:
Finalmente, tenía un nombre para mi problema: hipotiroidismo. Mi médico ordenó análisis de sangre simples para TSH (hormona estimulante de la tiroides) y T4 y me recetó un medicamento genérico llamado Levotiroxina para reemplazar las hormonas tiroideas que mi cuerpo no producía naturalmente.
No funcionó particularmente para mí porque solo tiene T4 y mi cuerpo no la convierte con éxito en T3 libre, siendo ese el motivo porque no me sentía mejor. Después de tomar el medicamento durante unos años, todos los síntomas: mi mala memoria, el peso extra, los dolores musculares y la falta de motivación seguían ahí.
Descubrí que nuestros cuerpos necesitan T4 y T3 para funcionar bien. Mi cuerpo estaba teniendo problemas para convertir T4 en T3. Estas hormonas trabajan juntas para regular la temperatura corporal, la frecuencia cardíaca y el metabolismo, lo que explica científicamente la razón de todos mis síntomas. Esa fue la razón por la que los medicamentos recetados tradicionalmente, como la levotiroxina, no me funcionaron.
No funcionó particularmente para mí porque solo tiene T4 y mi cuerpo no la convierte con éxito en T3 libre, siendo ese el motivo porque no me sentía mejor. Después de tomar el medicamento durante unos años, todos los síntomas: mi mala memoria, el peso extra, los dolores musculares y la falta de motivación seguían ahí.
Descubrí que nuestros cuerpos necesitan T4 y T3 para funcionar bien. Mi cuerpo estaba teniendo problemas para convertir T4 en T3. Estas hormonas trabajan juntas para regular la temperatura corporal, la frecuencia cardíaca y el metabolismo, lo que explica científicamente la razón de todos mis síntomas. Esa fue la razón por la que los medicamentos recetados tradicionalmente, como la levotiroxina, no me funcionaron.
Pistas para mis problemas de tiroides:
1. Las amalgamas dentales que reemplacé en Perú hechas de una combinación de metales: plata, estaño, cobre y mercurio los cuales fueron consumidos por mi cuerpo al desmoronarse dentro y fuera de mi boca, al ser inhalados por mi boca y nariz, y de los vapores que surgen de la perforación a la hora que el dentista reemplazaba mis amalgamas por unas sin metales pesados. Especialmente el mercurio es peligroso para el cuerpo.
2. Debido a la incapacidad de mi cuerpo para absorber el yodo de los alimentos, descubrí que necesitaba tomarlo por vía oral, junto con otras vitaminas que ayudarían a estabilizar mi tiroides.
3. Los jacuzzis durante largos períodos de tiempo me hicieron susceptible a altas cantidades de cloro que afecto negativamente mi tiroides.
4. Botellas de agua de plástico con sustancias químicas BPA interrumpieron mi sistema endocrino haciendo que mi tiroides fuera ineficaz.
5. Los pesticidas, los productos químicos, los antibióticos, las hormonas añadidas al pollo, carne, el gluten en el pan, fideos y pasteles que tanto me gustaban alteraron mi sistema endocrino causandome problemas con mi tiroide y pueden causar otras enfermedades también.
6. El bagaje emocional de las relaciones y los factores estresantes de ayudar a mis padres ancianos hicieron que mi tiroides cambiara de hipo a hiper.
2. Debido a la incapacidad de mi cuerpo para absorber el yodo de los alimentos, descubrí que necesitaba tomarlo por vía oral, junto con otras vitaminas que ayudarían a estabilizar mi tiroides.
3. Los jacuzzis durante largos períodos de tiempo me hicieron susceptible a altas cantidades de cloro que afecto negativamente mi tiroides.
4. Botellas de agua de plástico con sustancias químicas BPA interrumpieron mi sistema endocrino haciendo que mi tiroides fuera ineficaz.
5. Los pesticidas, los productos químicos, los antibióticos, las hormonas añadidas al pollo, carne, el gluten en el pan, fideos y pasteles que tanto me gustaban alteraron mi sistema endocrino causandome problemas con mi tiroide y pueden causar otras enfermedades también.
6. El bagaje emocional de las relaciones y los factores estresantes de ayudar a mis padres ancianos hicieron que mi tiroides cambiara de hipo a hiper.
¡Una solución holística que funciona!
En mi investigación encontré un médico holístico que me ayudó a descubrir que había otros medicamentos naturales disponibles para los compuestos de la tiroides. Estos medicamentos milagrosos se crean a partir de la glándula tiroides de los cerdos o vacas que proporcionan hormonas tiroideas a una persona con baja producción de su propia glándula tiroides. Estas glándulas tiroideas de cerdo secas y en polvo se pueden encontrar en medicamentos como: Armour, NP Thyroid, Nature-Throid y WP Thyroid fabricados por farmacias de compuestos.
Pasé de una medicina natural: Thyroid Armor a Nature-Thyroid porque la compañía que producía Armor cambió la composición agregando mucho ingredientes inactivos que bloqueaba el ingrediente principal. Nature-Thyroid tampoco funcionó para mí porque aunque tiene T4 y T3, no elevó suficiente mi T3 libre para sentirme bien. Eso me llevó a buscar una medicina diferente para volver a sentirme como yo misma. Pero la vida tenía un plan diferente para mí.
Pasé de una medicina natural: Thyroid Armor a Nature-Thyroid porque la compañía que producía Armor cambió la composición agregando mucho ingredientes inactivos que bloqueaba el ingrediente principal. Nature-Thyroid tampoco funcionó para mí porque aunque tiene T4 y T3, no elevó suficiente mi T3 libre para sentirme bien. Eso me llevó a buscar una medicina diferente para volver a sentirme como yo misma. Pero la vida tenía un plan diferente para mí.
Ocurrió un evento traumático en mi vida. Mis hermanas me dijeron que mi papá se iba a morir y yo tenía que tomar el primer avión a Lima, Perú. Fue entonces cuando investigué técnicas de curación adicionales (terapias energéticas, meditación y un nuevo programa de ejercicios) para controlar mis emociones y el estrés. Esto me ayudó a estabilizar mi tiroides nuevamente.
Fue tan asombroso para mí que a través de mi propio trabajo de detective pude estabilizar mi tiroides y poder viajar a Perú para decir mi último adiós a mi padre moribundo. Pero mi trabajo aún no estaba terminado. Mi deseo de aumentar mi T3 libre para sentirme al 100% me trajo de regreso al consultorio del médico.
Me ofrecieron una opción más para aumentar mi T3 libre y fue volver a la levotiroxina, pero esta vez fue hecha por una farmacia compuesta(sin ingredientes inactivos adicionals), para agregarla con la medicación T3. Este fue un proceso largo. Primero, comencé con cápsulas de dosis bajas de T4 y T3 y que la incrementaba poco a poco cada semana.
Después de encontrar la dosis correcta para ambos medicamentos (T4 y T3) finalmente, mi médico combinó ambos medicamentos en una sola cápsula que se ajusta de acuerdo con mis análisis de sangre cada 3-6 meses.
¡Me alegra decir que mis números se han equilibrado durante los últimos 4 años! Mi T3 libre finalmente está en el rango normal superior. La mejor noticia es que perdí el peso extra que había ganado, mi cabello volvió a ser grueso y brillante como antes, mi memoria y energía volvieron a la normalidad y los dolores de espalda desaparecieron. Mi entusiasmo y motivación regresaron, así que me puse nuevas metas. Lo más importante de todo: ¡me sentí feliz de nuevo!
Fue tan asombroso para mí que a través de mi propio trabajo de detective pude estabilizar mi tiroides y poder viajar a Perú para decir mi último adiós a mi padre moribundo. Pero mi trabajo aún no estaba terminado. Mi deseo de aumentar mi T3 libre para sentirme al 100% me trajo de regreso al consultorio del médico.
Me ofrecieron una opción más para aumentar mi T3 libre y fue volver a la levotiroxina, pero esta vez fue hecha por una farmacia compuesta(sin ingredientes inactivos adicionals), para agregarla con la medicación T3. Este fue un proceso largo. Primero, comencé con cápsulas de dosis bajas de T4 y T3 y que la incrementaba poco a poco cada semana.
Después de encontrar la dosis correcta para ambos medicamentos (T4 y T3) finalmente, mi médico combinó ambos medicamentos en una sola cápsula que se ajusta de acuerdo con mis análisis de sangre cada 3-6 meses.
¡Me alegra decir que mis números se han equilibrado durante los últimos 4 años! Mi T3 libre finalmente está en el rango normal superior. La mejor noticia es que perdí el peso extra que había ganado, mi cabello volvió a ser grueso y brillante como antes, mi memoria y energía volvieron a la normalidad y los dolores de espalda desaparecieron. Mi entusiasmo y motivación regresaron, así que me puse nuevas metas. Lo más importante de todo: ¡me sentí feliz de nuevo!
Piense en la tiroides como un instrumento en la orquesta que es tu cuerpo. Si un instrumento está apagado, entonces toda la pieza musical está desafinada. Mi cuerpo necesitaba una gran afinación para que mi canción pudiera cantarse maravillosamente.
En este blog, hablaré sobre todos los diferentes aspectos que me ayudaron en mi viaje para equilibrar mi tiroides. Incluiremos temas como: problemas adicionales de la tiroides, nutrición, ejercicio, análisis de sangre, vitaminas, suplementos, hormonas bioidénticas y, finalmente, regímenes antienvejecimiento.
Mi objetivo es ayudar a las personas en su camino a descubrir cómo tratar esta complicada enfermedad de una manera que funcionó para mí y darles la esperanza de que puedan vivir una vida normal y productiva. Continuemos nuestro viaje juntos, con una tiroide feliz y mejor equilibrada.
El contenido de mythyroidrelief.com, como texto, gráficos o imágenes, y otros materiales, son solo para fines educativos e informativos. No pretende ser un sustituto del asesoramiento, diagnóstico o tratamiento profesional médico o nutricional. No debe utilizarse como sustituto de la consulta médica. El conocimiento proporcionado en este blog proviene de las propias experiencias e investigaciones del autor. Consulte a su médico antes de tomar cualquier decisión relacionada con su atención médica.
En este blog, hablaré sobre todos los diferentes aspectos que me ayudaron en mi viaje para equilibrar mi tiroides. Incluiremos temas como: problemas adicionales de la tiroides, nutrición, ejercicio, análisis de sangre, vitaminas, suplementos, hormonas bioidénticas y, finalmente, regímenes antienvejecimiento.
Mi objetivo es ayudar a las personas en su camino a descubrir cómo tratar esta complicada enfermedad de una manera que funcionó para mí y darles la esperanza de que puedan vivir una vida normal y productiva. Continuemos nuestro viaje juntos, con una tiroide feliz y mejor equilibrada.
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